¿Qué es un mapa de contenidos y cómo crear uno en tu estrategia?

Mapa de contenido

Para tener una estrategia de contenidos efectiva, es necesario tener un plan de acción. Un mapa de contenidos es una herramienta valiosa para mejorar esta estrategia y asegurarte de no perderte en el camino. Este documento recopila y organiza la información que tu público objetivo demanda en cada etapa de su viaje de compra, y que debes proporcionarles.

En este artículo, te explicaremos qué es un mapa de contenidos, cuáles son sus componentes clave y cómo crear uno.

Qué es un mapa de contenidos

Un mapa de contenidos es un plan estratégico para organizar el contenido que se presentará a tu público objetivo. Este documento especifica a qué tipo de consumidor se está dirigiendo, qué le interesa y en qué momento del ciclo de compra se encuentra.

Trabajar con un mapa de contenidos facilita la planificación y el desarrollo de tu estrategia de contenidos, permitiéndote personalizar la información según la fase del viaje de compra del cliente.

Para qué sirve un mapa de contenidos

Para entender para qué sirve, primero os dejamos algunas de las utilidades de un mapa de contenidos.

Mejora la comprensión del público objetivo

Antes de crear tu mapa de contenidos, debes tener bien definido a tu público objetivo. Debes conocer sus inquietudes, intereses, motivaciones y frustraciones para poder satisfacer sus necesidades y dar solución a sus problemas. Un mapa de empatía puede ayudarte a profundizar aún más en el conocimiento de tu cliente potencial.

Mejora la eficacia de las estrategias

Con un mapa de contenidos tienes una visión clara de lo que debes ofrecer y cómo hacerlo. Por ejemplo, puedes determinar el tipo de formato (imágenes, videos o audio) que mejor se adapte a tu estrategia de social media.

También puedes mejorar tu estrategia SEO, ya que tendrás en cuenta las intenciones de búsqueda de tus usuarios y podrás identificar fácilmente las palabras clave que utilizan. Al ofrecer contenido relevante, atraerás tráfico de calidad a tu sitio web o blog.

Además, al proporcionar contenido de valor, ganarás autoridad, mejorarás la percepción de tu marca y agradarás a tu audiencia. Estos factores son esenciales para impulsar tu estrategia de inbound marketing.

Ordena el contenido

Con un mapa de contenidos puedes ver todas las temáticas que puedes abordar en función de la fase en la que se encuentre tu usuario en el embudo de conversión. Será una excelente fuente de ideas y te permitirá identificar posibles vacíos en tu estrategia.

Además, podrás ver de manera sencilla cómo reutilizar tu contenido para aprovecharlo al máximo. Ya sea que tengas contenido previamente publicado o que estés planificando lo que debes ofrecer, un mapa te permitirá organizarlo mejor.

Los criterios utilizados en los mapas de contenidos (que veremos más adelante) te ayudarán a filtrar por relevancia en función de la fase del embudo en la que se encuentre tu buyer persona.

Mantén el control

Un mapa de contenidos te ayuda a evitar que los usuarios se pierdan y a que tú cumplas tus objetivos. Puedes establecer un camino claro para que el usuario avance naturalmente a través del embudo de conversión.

Impacta a tu público objetivo

Ofrecer contenido valioso en el momento adecuado contribuye a ganarte la confianza de tus usuarios y a que te posiciones en su mente. De esta manera, cuando llegue el momento de tomar decisiones, tu marca será una opción con altas posibilidades de éxito.

Factores críticos en un mapa de contenidos

Un mapa de contenido se compone de tres partes principales: el perfil del comprador, el contenido relevante para él y el ciclo de vida.

Examinemos cada uno de ellos y su función.

Perfil del comprador o buyer persona

El perfil del comprador o buyer persona es una descripción semi ficticia de tu cliente ideal, donde debes incluir toda la información que te permita comprender sus necesidades y preferencias en términos de satisfacción.

Esto te ayuda a saber cómo preparar tus contenidos para ser una opción atractiva para ellos.

No es necesario crear un perfil de comprador para cada producto o servicio que ofrezcas, pero es recomendable hacer uno por cada tipo de usuario que tengas cuando las diferencias son sustanciales. De esta manera, lograrás un ajuste perfecto de tus contenidos.

Contenido relevante

Todos los contenidos tienen diferentes niveles de complejidad, y es importante que puedas ofrecerlos todos para satisfacer las necesidades de tu público objetivo.

El más crucial, probablemente, es el contenido de captación, que es la información básica sobre el tema. Sin embargo, no confundas «básico» con baja calidad. La calidad siempre debe ser alta.

Recuerda que los usuarios evolucionan a lo largo del ciclo de vida, y sus necesidades de contenido cambian y se vuelven más exigentes. Este es el momento en que entran los siguientes niveles de relevancia de la información. De esta forma, si el usuario desea avanzar porque le gustó lo que encontró, debe ser capaz de hacerlo.

Ciclo de vida

El ciclo de vida del perfil del comprador es muy similar al embudo de ventas, y se compone de tres etapas similares al TOFU, MOFU y BOFU.

La atracción y el reconocimiento (TOFU)

En esta fase, el usuario acaba de descubrir que tiene una necesidad y empieza a buscar información. Como su conocimiento sobre el tema es limitado, se presenta la información de manera clara y fácil de entender, priorizando la comodidad y el aprendizaje para ganarse su confianza.

Consideración e investigación (MOFU)

Una vez que el usuario ha comprendido los conceptos básicos, quiere profundizar y conocer mejor el tema. Aquí es posible optimizar el formato de acuerdo a las preferencias del usuario, siempre manteniendo el mismo nivel de calidad y simplicidad en la presentación de la información.

En esta fase es recomendable solicitar información del usuario, como su dirección de correo electrónico, para seguir alimentándolo con contenido valioso y medir la eficacia del plan.

Decisión (BOFU)

En la fase final, el buyer persona ya sabe qué necesita y cómo satisfacerlo, y ahora solo quiere determinar cuál es la mejor opción.

Por lo tanto, el contenido que ofrezcas es fundamental para cerrar la venta. Algunas de las opciones más comunes son los testimonios y las preguntas frecuentes (FAQs), ambos son muy efectivos para demostrar tu fortaleza. Si complementas esto con una buena cantidad de prueba social, ganarás aún más puntos.

Cómo crear un mapa de contenidos

Ya estás familiarizado con la importancia de tener un mapa de contenidos en tu estrategia de marketing de contenidos. Ahora es el momento de aprender cómo crear uno.

Define tu buyer persona

Antes de comenzar a crear contenido, es importante tener claro quién es tu público objetivo. Para ello, debes crear una buyer persona, un perfil ficticio que represente a tu cliente ideal.

No te bases en suposiciones, sino en investigaciones reales y datos verificables para definir la personalidad, estilo de vida, valores, creencias, preferencias, entre otros aspectos de tu cliente ideal.

Una vez tengas toda la información, presenta tu buyer persona como una historia para que sea más fácil de entender y asimilar.

Comprende el ciclo de compra de tu cliente

Cada buyer persona tiene un ciclo de compra diferente, y es importante conocerlo para poder trabajarlo de manera efectiva.

El ciclo puede incluir las etapas de descubrimiento, consideración, decisión, engagement (opcional) y post-compra. Conociendo este proceso, podrás crear contenido que acompañe y guíe a tu cliente en su jornada hacia la compra.

Estructura tus temas de contenido

Con tu buyer persona y ciclo de compra claramente definidos, es hora de estructurar los temas de contenido que desarrollarás en tu estrategia.

Busca temas relevantes e interesantes para tu público objetivo y asegúrate de cubrir todas las etapas del ciclo de compra. Considera también la frecuencia y formato que utilizarás para cada tema.

Planifica y organiza tu contenido

Con todos los temas de contenido estructurados, es hora de planificar y organizar tu contenido de manera efectiva.

Asigna fechas de publicación, distribución y promoción a cada tema de contenido. Asegúrate de tener un equilibrio entre contenido informativo, entretenido y de valor para tu público.

Revisa y ajusta tu mapa de contenidos

Una vez que hayas creado y puesto en marcha tu mapa de contenidos, es importante revisarlo y ajustarlo periódicamente.

Analiza el rendimiento de tus contenidos y ajusta tu estrategia en consecuencia. Considera también los canales en los que te vas a mover, que son aquellos en los que está tu público objetivo: en qué redes sociales, email marketing, Ads, etc.

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